





En la Amazonía y otros bosques, los pueblos indígenas han vivido en armonía con su entorno durante milenios. Su cosmovisión y espiritualidad confieren sacralidad a sus tierras, siendo el Rostro Harakbut uno de los lugares más venerados y misteriosos.
La recreación virtual del Rostro Harakbut, mediante tecnologías como la modelización 3D y la realidad virtual, busca preservar este lugar sagrado, permitiendo una conexión respetuosa con su legado cultural y espiritual sin dañarlo.


Los Harakbut, que se autodenominaron así en la década de 1980, habitan las tierras sagradas de Madre de Dios y Cusco, en el sureste del Perú.
Resistieron la conquista incaica y, durante el auge del caucho, sufrieron una gran pérdida, con más del 90% de su población diezmada. Con la llegada de los misioneros dominicos, comenzaron a interactuar con el mundo exterior. Se dividen en siete subgrupos: Arakbut, Arazaeri, Toyeri, Sapiteri, Kotsimberi, Kisamberi y Wachiperi.




